Como propietario de un lote de varias hectáreas, en algún momento estructuré y licencié un proyecto de viviendas unifamiliares recreativas con una forma de arquitectos diseñadores. Sin embargo, al comenzar a construir las primeras casas con recursos de nuestro bolsillo, evidenciamos que no se vendían y que los vecinos estaban construyendo ya apartamentos con mejor rotación de ventas. Además, vimos que no lograríamos retornar la inversión y recibir el valor del predio. Por este motivo, contratamos a Asimétrico y con sus estudios de evaluación normativa evidenciamos que no estábamos sacando el mayor provecho del potencial del predio. Nos permitieron identificar que, en vez de casas, debíamos estructurar un nuevo proyecto con apartamentos, muchos más, y qué servicios comunes y características de las viviendas debíamos ofrecer para poder competir. Nos salvaron el negocio de malas decisiones previas, por contratar arquitectos que no conocen de estructuración de negocios inmobiliarios.